Referentes conceptuales

Con una mirada nueva desde la Secuencias Didácticas

Cuando el niño nace la primera experiencia que tiene es la comprensión de sonidos e interpretación del lenguaje oral para poder acceder a las interacciones con los demás; con su madre es con quien inicia la proximidad de afectos de las palabras cargadas de significado y como diría Brunner “Al ingresar a lenguaje oral, el bebé no sólo se incluye en el circuito de significados existentes, ingresa también al espacio de las intencionalidades, de los intereses, de las disputas por el sentido”, el niño no solo ingresa a una comunidad familiar hablante sino que es el inicio a unas interacciones sociales y culturales que lo irán ubicando en un contexto social particular. Cuando el niño se expresa oralmente se da cuenta de que no está solo, hay otros sujetos, con intereses comunes y particulares que se reconocen a nivel individual y estas a su vez requieren de la regulación de unas reglas de comunicación.

Siendo la escuela el espacio de construcción de la voz del sujeto, pero lo que prima es la voz de un saber que se expresa de manera imperativa para controlar, desconociendo el espacio democrático de inmersión a la vida social y cultural del niño. Es por eso que necesitamos cambiar las practicas pedagógicas y sólo se logra si partimos de que "el aula de clase puede configurarse como un escenario privilegiado para que el niño construya su propia voz, para que esa voz se vincule a esa micro comunidad de habla, para ser reconocido como sujeto social" (el lenguaje oral y el reconocimiento del otro) ya que es allí donde se generan los espacios para la democracia y la participación ciudadana del sujeto pues, es fundamental este proceso para que se construyan lazos afectivos, valores de tolerancia y responsabilidad de lo que se dice y para que se dice, estableciendo una identidad personal y social.
Para garantizar las diferentes formas de participación ciudadana es necesario establecer normas de regulación para la comunicación y el reconocimiento por el otro, para respetarlo. También se hace necesario orientar las conversaciones para respetar los turnos, para preguntar, para responder, para opinar y defender lo que se dice; el desarrollo de estas pautas del lenguaje permitirán el conducto para el desempeño académico y es deber de la escuela mantener estas formas de participación. El lenguaje oral requiere de tipos de discursos como son el argumentativo, narrativo, expositivo, descriptivo e informativo.
El aprendizaje es un ejercicio de interacción con el medio circundante y las demás personas pero el problema en torno al aprendizaje proviene desde el punto de vista del desarrollo humano y lo que ocurre en los salones de clase de las escuelas. La adquisición de la lengua oral y escrita en el ser humano es y debe ser el resultado de la apropiación de códigos lingüísticos. Para el ser humano lo importante es disponer de las herramientas necesarias para adaptarse social y culturalmente a unas condiciones ambientales y la forma de ir comprendiendo ese hecho es mediante la adquisición del lenguaje. Este aprendizaje es mucho más que aprender a leer y escribir, lo más importante de una persona no es disponer de una habilidad específica, sino hacer que esa habilidad le sea útil para ser crítico, constructor de su propia vida y del colectivo en general. La escuela esta impregnada de la oralidad, este espacio permite el aprendizaje de las habilidades comunicativas y estas no se manifiestan de manera aislada sino que confluyen de manera articulada para aprender a leer, escribir, reflexionar, disfrutar de la literatura y la musicalidad de las palabras sino también para regular la vida escolar aprendiendo a respetar los turnos, aprendiendo a escuchar como diría Anna Camp “El uso del lenguaje oral tiene dos facetas: hablar y escuchar. Quizás no se ha puesto suficiente énfasis que escuchar implica comprender, interpretar lo que se vehicula a través dela palabra oral y las relaciones que se establecen entre cada uno de los miembros de la escuela implican nuevas formas de hablar distintas al ámbito familiar. Es así que el aula de clase es un espacio de vida y como tal; fuentes de contrastes, diferencia de pareceres, tensiones conflictos que tendrán que ser resueltos con el dialogo: Aprender a hablar de todo ello es un camino para aprender a convivir en la diferencia para encontrar vías de entendimiento entre las personas” . Finalmente los usos orales les permiten al niño aprender a hablar y entrar en el mundo de la literatura para cantar, dramatizar, declamar, exponer, narrar, leer en voz alta y así cumplir con las funciones del lenguaje.


Para citar:

- Hacia una Pedagogía del Discurso: Elementos para Pensar la Competencia Argumentativa en los Procesos de Escritura de la Educación Básica; Mauricio Pérez Abril, UNAL, Bogotá, 2.000.


- ¿Es Posible Leer en la Escuela? Delia Lerner, Conferencia, 8° feria del libro Bogotá. 1995.